Profecía alerta “California será destruida por Megaterremoto antes de la Venida de Cristo”
Un enjambre de 134 temblores en California y un estudio geológico reciente que confirmó un año de mayor actividad sísmica han llevado a especulaciones de que los terremotos son un portal para que una fuerza destructiva enviada por Dios venga al mundo antes que el Mesías, atacando indiscriminadamente tanto el bien como el mal.
El pasado lunes, un terremoto de 3.4 grados sacudió el centro de California. Pese a que se considera un evento menor, el sacudón no se ha detenido y la inestabilidad en esa sección de tres millas de la volátil falla de San Andreas generó 133 temblores adicionales en los últimos 7 días. Todos menos 17 de estos temblores no fueron detectados por el público en general, registrándose a menos de 2.5 en la escala de Richter. Este enjambre de temblores suscitó temores de “el grande”, el devastador terremoto de la costa oeste largamente esperado.
Tales terremotos calamitosos y volcanes elevan la conciencia religiosa, ya que se mencionan explícitamente en la profecía como parte del fin de los días.
Y traeré la tercera parte al fuego, y los refinaré como se refina la plata, y los probaré como se prueba el oro; invocarán Mi nombre y Yo los responderé; Diré: ‘Es mi pueblo’ y dirán: ‘Hashem es mi Dios’. Zacarías 13: 9
El rabino Avraham Arieh Trugman, director del Instituto Ohr Chadash Torah, dijo a Israel News que los desastres naturales brindan muchas lecciones para los espirituales, sin embargo también plantean dilemas teológicos difíciles.
“Hashem (Dios) tiene una razón para todo, pero sería un tanto arrogante afirmar que conocemos definitivamente una razón para los desastres”, dijo el rabino Trugman. “No estamos en posición de conocer las verdaderas causas, pero debemos tratar de entender estos fenómenos naturales como una llamada de atención”.
La ecología, como estudio de la interconexión de la naturaleza, es intrínsecamente bíblica, explicó el rabino Trugman.
“Hashem es uno, y todo es de Él, entonces todo está interconectado”, dijo el rabino. “De acuerdo con la tradición judía, el hombre y sus acciones están conectados incluso a los terremotos, de maneras que realmente están más allá de nuestra comprensión”.
Llamativamente, la búsqueda de los científicos de una causa detrás de la reciente ola de terremotos los llevó a una conclusión similar en la cual la unidad del mundo y la interacción entre elementos aparentemente dispares era la clave.
Un estudio actual proporcionado en la reunión anual de la Sociedad Geológica de América sugirió que este año es un período de tiempo especialmente activo para terremotos y volcanes. El estudio rastreó la historia de los terremotos en todo el mundo de magnitud 7,0 o superior desde 1900, señalando un promedio de 15 terremotos de este tipo cada año.
A intervalos espaciados uniformemente, este promedio saltó a entre 25 y 30. El ciclo correspondió a desaceleraciones periódicas en la velocidad del giro de la tierra que afecta la actividad sísmica. Los investigadores dan crédito a la desaceleración actual con la ola de terremotos que recientemente golpeó a México, y el gran terremoto que sacudió a Irak e Irán.
El estudio predijo una cantidad superior a la media de terremotos en el próximo año 2018.
“Somos parte de un proceso mayor que incluye fenómenos naturales”, dijo el rabino Trugman. “El Talmud (Ley Oral) da razones para el fenómeno natural. Los Sabios entendieron que los eventos naturales tienen razones espirituales, aunque no seamos conscientes de sus verdaderas causas “.
No obstante, continuó, comprender el elemento divino de los desastres naturales plantea dificultades morales. “Es difícil justificar la parte de Dios en los desastres naturales cuando mueren miles de personas, buenas y malas juntas”, dijo el rabino Trugman. “¿Dónde está la relación del individuo con Dios?”
Para una respuesta judía, el rabino Trugman citó al rabino Shlomo Yitzchaki, un rabino medieval francés conocido por el acrónimo Rashi. En su comentario sobre el relato bíblico del diluvio, Rashi abordó el dilema de cómo Dios puede matar tanto a las personas buenas como a las malas en los desastres naturales.
Hashem le dijo a Noaj: “He decidido poner fin a toda carne, porque la tierra está llena de iniquidad por causa de ellos; los destruiré con la tierra”. Génesis 6:13
“Cuando la inmoralidad se extiende fuera de control, Dios le da permiso al ‘destructor’ y toma al inocente con el culpable, el bueno con el malo”, dijo el rabino Trugman, parafraseando a Rashi.
“Las implicaciones de esto es que hay ciertas fuerzas en el mundo que una vez que se llega a un cierto punto de inflexión, lo bueno se toma con lo malo y no hay nada que se pueda hacer al respecto”.
El rabino Trugman hizo hincapié que este proceso cambiará después de la llegada del Mesías y que los desastres naturales que marcaron el comienzo del Mesías desaparecerán.
“En un punto, la tierra será ‘domesticada’ y conforme la realidad física y espiritual se fusione y se aclare cada vez más, no habrá más desastres naturales”, dijo el rabino Trugman. “Esto va de la mano con la tradición judía de que la naturaleza humana también cambiará radicalmente, de modo que también habrá un fin para el hambre, las guerras, los celos y la competencia”.
Fuente: Breaking Israel News