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El presidente Donald Trump fue el expositor principal el pasado sábado en la primera celebración de la Celebración de la Libertad, realizada por el pastor Robert Baptiste de Dallas, Rev. Robert Jeffress, en Washington DC.
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El encuentro celebró no sólo la independencia de la nación, sino ademas las grandes victorias de la libertad religiosa que han aumentado bajo el mandato del nuevo presidente. El presidente reconoció el importante rol de los cristianos evangélicos en su victoria electoral y repitió su promesa de defender su libertad religiosa.
“No queremos ver a Dios forzado a salir de la plaza pública, expulsado de nuestras escuelas o expulsado de nuestra vida cívica”, dijo. “Queremos ver oraciones antes de los partidos de fútbol, si quieren orar, queremos que todos los niños tengan la oportunidad de conocer las bendiciones de Dios.
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“No permitiremos que censuren los sermones, que restrinjan la libertad de expresión de nuestros pastores y predicadores y de la gente que más respetamos. El gobierno debe proteger a los cristianos.Como sucede en el caso de Robert, por eso, como prometí al pastor Jeffress y a otros líderes religiosos, firmé Una orden ejecutiva que sigue -y esto es algo que me hace muy feliz y muy orgullosa- siguiendo mi promesa de campaña de impedir que la Enmienda Johnson interfiera con sus derechos de la Primera Enmienda.
“Mientras yo sea presidente, nadie lo impedirá de practicar su fe o de predicar lo que está en su corazón, queremos escucharlo”.
Fuente: Charisma News
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