Especialistas en Ciencias Economicas demuestran que el Vaticano puede erradicar la Pobreza Mundial
Mientras todo el mundo piensa que existe una gran corrupción en las iglesias evangélicas en la administración de diezmos y ofrendas, existe una institución religiosa que ha sido la más cuestionada de la historia, más que ninguna otra en el mundo, en lo que se refiere a corrupción y riquezas. Como todos sabemos, dicha institución es la Iglesia Católica Romana con sede en el Vaticano.
Para muchos, el Vaticano es la organización más corrupta, ambiciosa, apóstata y diabólica que existe en el mundo entero y muchos se aventuran a decir que es el sitio del actual Trono de Satanás. Las conjeturas y especulaciones surgen en especial cuando se hace referencia a su acumulación de riquezas sostenida por siglos, sobre todo durante el período de mil años del Oscurantismo, en el que reinó y juzgó todo en el mundo.
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En nuestros días, la institución siempre busca un porcentaje de participación en los grandes eventos y decisiones que son tomadas en las diferentes naciones, y siempre procura que un representante de la Iglesia Católica sea observante de la desición.
Los estudios escatológicos presentan al Vaticano como la ciudad asentada sobre los siete montes, la Gran Babilonia, la mujer que ha fornicado con todos los reyes de la tierra hasta acumular riquezas por medio de sangre hasta más no poder y que se viste de escarlata, lino, oro, plata y piedras preciosas, según Apocalipsis 18. Cada vez son más los que se suman a está interpretación profética.
“Y diciendo: !!Ay, ay, de la gran ciudad, que estaba vestida de lino fino, de púrpura y de escarlata, y estaba adornada de oro, de piedras preciosas y de perlas! Porque en una hora han sido consumidas tantas riquezas. Y todo piloto, y todos los que viajan en naves, y marineros, y todos los que trabajan en el mar, se pararon lejos; y viendo el humo de su incendio, dieron voces, diciendo: ¿Qué ciudad era semejante a esta gran ciudad? Y echaron polvo sobre sus cabezas, y dieron voces, llorando y lamentando, diciendo: !!Ay, ay de la gran ciudad, en la cual todos los que tenían naves en el mar se habían enriquecido de sus riquezas; pues en una hora ha sido desolada! Alégrate sobre ella, cielo, y vosotros, santos, apóstoles y profetas; porque Dios os ha hecho justicia en ella.” Apocalipsis 18:16-20
El Vaticano acopia el Segundo Tesoro en oro más grande del mundo
Según la revista italiana “Oggi”, el tesoro en oro del Vaticano, en base a “informaciones extraoficiales” es conocido como el segundo más grande del mundo con: 7000 millones de liras = 3.500.000.000 Euros, detrás del tesoro de los Estados Unidos para el año 1952. En comparación, el monto del tesoro en oro del estado de Italia es de “sólo” 400 mil millones de liras.
¿Cómo llegó el Vaticano a este enorme patrimonio en oro?
El Vaticano tiene gran actividad financiera en la bolsa de Wall Street. Donde se encuentra, la mayoría de las reservas financieras exteriores del Vaticano. En total, el patrimopnio de la central de la iglesia, en acciones y otras participaciones en capitales, para el año 1958 alcanzaron los 50 mil millones de Euros (en moneda actual).
Esta cifra, para lo que va del año 2016, creció a mucho más de 100 mil millones de Euros.
Las riquezas del Vaticano son incalculables:
En España la Iglesia católica es una gran potencia inmobiliaria. No hay pueblo sin iglesia, ni ciudad sin catedral, ni monte sin hermita. Se calcula que el patrimonio eclesiástico está integrado por 100.000 inmuebles. O dicho de otra forma, el 80% del patrimonio histórico-artístico nacional pertenece a la Iglesia. (…) Es más, el 70% del suelo habitable de la ciudad vieja de Toledo está en manos de la Iglesia. Y lo mismo puede decirse de Ávila, Burgos o Santiago de Compostela. (…) Nadie sabe la cuantía total del patrimonio eclesiástico. La Iglesia no lo dice, escudándose en el funcionamiento diocesano de la misma (El Mundo, 22.01.02).
El tesoro en oro acumulado por el Vaticano fue robado a los indígenas de América. Como sabemos, millones de indígenes fueron aniquilados por este oro, y hasta el día de hoy no se les ha devuelto nada.
La Iglesia española es accionista de empresas como Inditex (Zara), Endesa, Banco Popular o Teléfonica. A través de Umasges, la sociedad creada por la cúpula eclesiástica, ésta invierte en Bolsa.
La Santa Sede es propietaria de acciones en la General Motors, IBM y Disney, además es inversora en empresas de alimentación (FOCUS-online). A esto hay que añadir empresas de servicios y de telecomunicación, así como bancos y aseguradoras valoradas en más de 12.000 millones de Euros.
La millonaria Iglesia exige al Estado cada año millones de euros en subvenciones:
El Estado español y la Santa Sede firmaron el 3 de enero de 1979, entre otros, un Acuerdo sobre Asuntos económicos de la Iglesia católica española, que contiene su financiación y su exención de impuestos.
Solamente a cargo directo de los Presupuestos Generales del Estado, la Iglesia católica recibió en 2005 la cifra de 141.469.680 Euros.
El gobierno ha decidido hacer un regalo anual a cargo de las arcas públicas y con dirección a las de la Conferencia Episcopal de 35 millones de euros extra, al margen de lo que les correspondería por ley. (El País, 12.11.05).
Existen pocos datos concretos sobre el dinero que percibe la Iglesia de las diferentes administraciones públicas con destino a conservar y mantener su patrimonio (iglesias, catedrales u otros edificios de su propiedad); no obstante, el pasado 17 de noviembre la Cadena Ser de España hizo público un informe elaborado por la Fundación Caja Madrid en el que se desvelaban los datos del año 2001. La Iglesia había recibido 106 millones de euros fundamentalmente de las arcas de los ayuntamientos en concepto de «conservación de patrimonio».
Mientras muchos centros públicos padecen situaciones penosas, con infraestructuras escasas, masificación, falta de medios, etc., el Estado subvenciona con 2.500.000 euros centros privados de educación que pertenecen a la Iglesia.
El montante total que la Iglesia recibe de las arcas públicas de España asciende a más de 3.300 millones de euros anuales.
Además de otras ventajas fiscales, la Iglesia no paga IVA en sus compras, ni paga impuesto de sucesiones o donaciones.
Está claro que con esta cantidad estrepitosa de dinero, la Iglesia Católica sería capaz de borrar la pobreza de la faz de la Tierra. La pregunta es ¿Por qué no lo hace? La respuesta es simple, porque no es la Iglesia de Cristo.
Fuente: Ante el Peligro de Apartarse de Dios