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ESTADOS UNIDOS.- Un niño de 7 años fue castigado frente a todos sus compañeros de clase y luego llevado a su casa por la policía luego de haber llevado a la escuela unas notas que contenían versículos de la Biblia.
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Sus padres, Christina y Jaime Zavala viven en Palmdale, California. En enero, inscribieron a su hijo en la Escuela Primaria Desert Rose en Palmdale, según una reciente carta del Liberty Counsel. Para animar a su hijo en la escuela, Christina le dio breves notas para leer durante la hora del almuerzo y cada nota incluía un verso de la Biblia.
El hijo de los Zavala, comenzó diciendo a sus compañeros sobre las notas de aliento de su madre y empezó a leer los versículos de la Biblia para ellos. Cada día, varios estudiantes se reunían alrededor del pequeño a escuchar las notas de la hora del almuerzo. Luego de un tiempo, un amigo le pidió al pequeño una copia del verso de la Biblia, porque él, también, quería tener”, explica la carta Liberty Counsel.
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Pronto, otros cinco estudiantes le pidieron a su amigo, un verso de la Biblia, y él les trajo copias adicionales para ellos.
Una niña se acercó a su maestro un día y le dijo, “Maestro, esta es la historia más hermosa que jamás he leído” y le obsequió su nota. Cuando el maestro vio la bella historia, se dio cuenta que era la Biblia, por ello, sacó al niño en frente de la clase y le dijo que no se permitía compartir historias de la Biblia en la escuela y si quería hacerlo, debía ser a la hora de salida afuera de la escuela.
El maestro también llamó a la madre, “Por favor dígale a su hijo que hay una separación entre la iglesia y el estado”, le manifestó a Christina. Así, de acuerdo con la petición del maestro, Christina y su hijo comenzaron a compartir los versos de la Biblia con los amigos de su hijo después de la escuela, en la puerta de la escuela.
Esto continuó hasta que el director de la escuela se acercó y les informó de que sus acciones estaban en “contra la política de la escuela.” En un comunicado de prensa emitido el jueves, Liberty Counsel describe la postura de la escuela frente al niño de siete años y su familia, como “una violación clara y manifiesta de los derechos de un niño.”
Fuente: Diario Cristiano Web
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