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ALEPPO.- Segun el periódico Aleppo Herald, un jihadista de ISIS se convirtió a Cristo luego de haber sido dado por muerto cerca de la frontera Este de Siria de donde fue rescatado por misioneros Cristianos de la zona.
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El hombre, que milagrosamente sobrevivió a multiples heridas de bala luego de un enfrentamiento entre ISIS y las fuerzas del Ejército de Siria, fue rescatado por miembros de una iglesia horas después de que se iniciara el combate.
Los miembros de la organización Cristiana tenían la intensión de darle al hombre una cepultura digna así que lo trasladaron 26 kilómetros antes de que el hombre volviera a la vida de manera miglagrosa. El hombre había muerto por las heridas recibidas.
Cuando el hombre recobró los sentidos, le comentó a Hermann Groschlin, una de las personas que lo asistieron, de las visiones que había tenido del “más allá”. Estos visiones cambiaron la vida de este jihadista de 32 años de edad y posteriormente lo condujeron a entregarse a Cristo en los días posteriores.
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“Me dijo que siempre le habían dicho que al morir como mártir, se le abrirían las Puertas del Cielo” recordó Groschlin. “Mientras ascendía hacia la luz de los Cielos, entidades demoníacas, o Jinns como él las llamó, aparecieron y lo condujeron hasta los pozos del Infierno. Allí tuvo que revivir todo el sufrimiento que había causado a otros y cada muerte que había causado en toda su vida. Incluso tuvo que revivir cada decapitación de sus víctimas pero ahora en el lugar de ellas”, imágines que, según el jihadista, lo perseguiran por el resto de su vida.
“Luego Alá, o Dios, le habló y le dijo que había fallado miserablemente como humano, que sería excluído de ingresar al Cielo si escogía morir, pero si escogía vivir nuevamente, tendría una nueva oportunidad de arrepentirse de sus pecados y caminar en el Camino de Dios una vez más.”
El jóven dijo que volvió a la vida momentos después y eventualmente se convirtió a Cristo en los días posteriores, convencido de que había sido engañado toda su vida religiosa de adorar a Allah.
El joven, cuyas heridas sanaron de manera sorprendente en poco tiempo, escogió vivir junto con los miembros de la Iglesia Presbiteriana que lo rescataron del desierto y espera que su historia ayude a muchos terroristas del ISIS a cambiar sus caminos y convertirse al único y verdadero Dios, concluyó Hermann Groschlin.
Fuente: World News Daily Report
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